La adquisición de empresas privadas es más compleja que de las empresas cotizadas porque muchos parámetros son información confidencial. La computación segura es la solución perfecta en estos escenarios: un adquiriente puede ofrecer un acuerdo tentativo a la empresa objetivo sin que ambas revelen ningún tipo de información sensible.

En un lado, el adquiriente especifica los términos del acuerdo y otra información privada: porcentaje del acuerdo en dinero efectivo y en acciones; porcentaje de las sinergias esperadas por la empresa objetivo; valor actual de las sinergias netas; y su propio precio por cada acción y el número de acciones en circulación:

En el otro lado, la empresa objetivo introduce el precio de la acción y el número de acciones en circulación:

Ambos participantes calculan de forma segura todos los términos del acuerdo, desde el precio de oferta a los nuevos porcentajes de participación en el empresa.

DESCARGO DE RESPONSABILIDADES

Lo anterior es tan sólo un ejemplo simplificado de propósitos ilustrativos. En el mundo real, habrá que introducir parámetros para la situacion específica y utilizar fórmulas más complejas que capturen por completo toda la complejidad del acuerdo.